9 Señales de que tu Gato no Puede Orinar: ¡No las Pases por Alto!

Si tu gato va al arenero con mucha frecuencia, permanece allí durante mucho tiempo, pero solo orina un poco, presta mucha atención. Podría tener una obstrucción urinaria. Este es un problema serio, especialmente frecuente en gatos mayores de un año. Tanto los gatos machos como las hembras pueden padecerlo, pero los gatos machos tienen mayor riesgo debido a que su uretra es más estrecha.

🔴 Síntomas clave de la obstrucción urinaria

Observa estas 9 señales:

Viajes frecuentes al arenero.

Esfuerzo prolongado en el arenero, con poco o ningún resultado.

Grupos de orina más pequeños y abundantes.

Llora o gime al intentar orinar.

Orina fuera del arenero.

Sangre en la orina.

Rechazo al tacto abdominal. El abdomen inferior puede sentirse tenso o hinchado debido a la vejiga llena.

Lamido excesivo de la zona genital.

Vómitos. Esta es una señal grave de que la afección está empeorando.

⚠️ Casos graves vs. leves

Caso grave (¡Consulte al veterinario de inmediato!): Si su gato no ha orinado en más de 24 horas y nota un bulto duro e hinchado en la parte baja del abdomen (como un pequeño globo), se trata de una emergencia. Acuda al veterinario inmediatamente. Una obstrucción completa puede causar insuficiencia renal y poner en peligro la vida del animal.

Caso leve (Observe atentamente): Si su gato orina, aunque sea poco, la situación puede ser menos grave. Puede intentar controlarlo en casa, pero debe observarlo con atención. Si no hay mejoría en un día o si la situación empeora, consulte a un veterinario.

❓ ¿Por qué ocurre esto?

Las principales causas incluyen:

No consumir suficiente agua. Esta es la causa más común. Concentra la orina, lo que puede provocar la formación de cristales que obstruyen la uretra.

Estrés o miedo. Los cambios en el hogar, los ruidos fuertes u otros factores estresantes pueden inflamar la vejiga.

Dieta. Algunos alimentos secos pueden contribuir a un pH excesivo en la orina o contener altos niveles de cenizas, aumentando el riesgo de formación de cristales.

🐾 Cómo ayudar a tu gato

Para ayudar a tu gato a evitar problemas urinarios, puedes:

Alimentarlo con una dieta que favorezca la salud urinaria. Algunos alimentos contienen ingredientes como el arándano, que puede ser muy beneficioso para el tracto urinario.

Aumentar la ingesta de agua. Agrega agua a la comida húmeda de tu gato, usa una fuente de agua para mascotas o proporciona agua en recipientes anchos y poco profundos. Algunos gatos prefieren beber de recipientes brillantes, como cuencos de metal.

Mantén la caja de arena limpia y colócala en un lugar tranquilo. Recoge sus excrementos a diario y colócalos en un lugar donde tu gato se sienta seguro y tranquilo. No lo vigiles mientras los usa.

Reduce el estrés. Al presentarle nuevas personas o mascotas, hazlo poco a poco. Ofrécele un rincón tranquilo donde esconderse si lo desea.

Fomenta el juego y el ejercicio. Juega con tu gato unos 15 minutos al día. Esto le ayudará a mantener un peso saludable y un buen nivel de actividad mental.

Programa revisiones veterinarias anuales. Para gatos con antecedentes de problemas urinarios, pruebas como una ecografía de vejiga o un análisis de orina son fundamentales.

Si observas alguna señal de alarma, actúa con rapidez. Consulta siempre con tu veterinario para obtener consejos personalizados según las necesidades específicas de salud de tu gato.

es_ESEspañol